El TDAH es uno de los trastornos de salud mental más comunes en los niños y también es bastante común encontrar casos de TDAH en adultos. En pocas palabras, se caracteriza por tres factores principales: incapacidad para prestar atención, hiperactividad y comportamiento impulsivo. Para ser diagnosticado con TDAH, estos síntomas deben ser significativos, duraderos y afectar su capacidad para manejar su trabajo (escuela o empleo) y su comportamiento.
Es importante puntualizar que el TDAH es un trastorno de salud mental y no una deficiencia personal. Tampoco es el resultado de una mala crianza de los hijos o de una dieta poco saludable. Por lo que no hay nada de qué avergonzarse si tienes TDAH, y no eres un “mal” padre si tu hijo lo tiene. Además hay diferentes tratamientos para el TDAH, por ejemplo suele manejarse con una combinación de medicamentos, psicoterapia (principalmente de corte conductual) y modificaciones en el estilo de vida. Tratamientos que suelen tener bastante éxito.
¡Para conocer más sobre el TDAH características, diagnostico y tratamiento continua leyendo!
Tabla de Contenidos
Comprendiendo que es el TDAH
El TDAH es uno de los trastornos de salud mental comunes o trastornos del neurodesarrollo que afectan a los niños. Y aunque por lo general, se diagnostica en la infancia, algunas personas no obtienen un diagnóstico adecuado hasta que son adultos. Otro dato estadístico importante es que es más común entre los hombres que entre las mujeres.
La mayoría de los síntomas del TDAH en los niños aparecen entre los 3 y los 6 años, pudiendo diagnosticarse con una evaluación médica o psicológica. Por otra parte para que un adolescente o adulto sea diagnosticado con TDAH, los síntomas deben haber aparecido antes de los 12 años, incluso si no fueron diagnosticados en ese momento.
Hay tres características principales que están presentes en las personas que tienen TDAH:
1.Falta de atención
Las personas con TDAH suelen tener problemas para concentrarse en una tarea y descubren que cuando intenta concentrarse, su mente se fija fácilmente en otros temas no relacionados. Por ello les puede ser difícil completar el trabajo y mantenerse organizados.
En este sentido, es importante entender que una persona con TDAH no carece de inteligencia, y no es desatendida por despecho o por rebeldía.
2. Hiperactividad
Muchas personas con TDAH pueden mostrar signos de hiperactividad. Estos pueden incluir la incapacidad de quedarse quieto, la necesidad de caminar, moverse o tocar. Esto a menudo se nota por primera vez en situaciones en las que estos comportamientos no se consideran inapropiados, como durante la escuela. Los adultos también pueden experimentar hiperactividad; por ejemplo imaginemos a alguien que siempre está “en movimiento” o que es extremadamente hablador.
3. Impulsividad
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Algunas personas con TDAH lidian con altos grados de comportamiento impulsivo, ya que no siempre tienen la capacidad de pensar bien las cosas antes de tomar una decisión. A veces, pueden ser disruptivos y parecer groseros. Esto puede conducir a problemas en sus relaciones, problemas de comunicación, así como posibles daños o lesiones contra ellos mismos o a otros.
Toma en cuenta que para que a alguien se le diagnostique TDAH, los síntomas deben ser persistentes, duraderos y afectar la capacidad de la persona para completar tareas apropiadas para su edad y funcionar con normalidad.
TDAH en adultos
Algunos adultos que tienen TDAH no saben que lo tienen. Esto es posible ya que durante la infancia los maestros o la familia no reconocieron la afección a una edad más temprana, tenían una forma leve de TDAH o se las arreglaron bastante bien hasta que experimentaron las exigencias de la edad adulta, especialmente en el trabajo.
Estos adultos pueden sentir que es imposible organizarse, mantener un trabajo o acordarse de asistir a las citas. Las tareas diarias como levantarse por la mañana, prepararse para salir de casa al trabajo, llegar al trabajo a tiempo y ser productivo en el trabajo pueden ser especialmente desafiantes para los adultos con TDAH no diagnosticado.
Además tienen más probabilidades de tener un historial de problemas con la escuela, el trabajo y las relaciones. Pueden parecer inquietos y tratar de hacer varias cosas al mismo tiempo, la mayoría sin éxito, por lo que veces prefieren soluciones rápidas en lugar de dar los pasos necesarios para obtener mayores recompensas.
Sin embargo, hay que recordar que nunca es demasiado tarde para buscar un diagnóstico y tratamiento para el TDAH y cualquier otra condición de salud mental que pueda ocurrir. Y que un tratamiento eficaz puede facilitar la vida cotidiana de muchos adultos y sus familias.
¿Cómo se vive el TDAH en adultos?: Síntomas
Ya hemos mencionado los síntomas generales del TDAH, la falta de atención, la hiperactividad y la impulsividad. Pero es importante agregar que algunas personas con TDAH tienen principalmente síntomas de falta de atención; otros, en su mayoría, tienen síntomas de hiperactividad-impulsividad o incluso algunas personas tienen ambos tipos de síntomas.
Para comprenderlos mejor te compartimos algunas actividades cotidianas en las que el TDAH puede manifestarse para los adultos. Estos síntomas son solo una guía y una referencia basada en características generales en la población que tiene este padecimiento.
Por lo que en ningún momento deben sustituir un proceso de diagnostico realizado por un profesional de la salud mental. Así que si tu o alguien que conoces sospechan que pueden tener TDAH acudan con un profesional capacitado.
Los signos de falta de atención pueden incluir dificultad para:
- Prestar mucha atención a los detalles y cometer errores aparentemente por descuido en el trabajo o durante otras actividades.
- Mantener la atención en tareas largas, como preparar informes, completar formularios o revisar documentos extensos.
- Escuchar atentamente, aún cuando se les habla directamente.
- Seguir instrucciones y terminar tareas en el lugar de trabajo.
- Organización de tareas y actividades y gestión del tiempo.
- Participar en tareas que requieren atención sostenida.
- Perder cosas como llaves, billeteras y teléfonos.
- Distraerse fácilmente con pensamientos o estímulos no relacionados.
- Ser olvidadizo en las actividades diarias, como pagar facturas, asistir a citas o devolver llamadas.
Los signos de hiperactividad e impulsividad pueden incluir:
- Experimentar una inquietud extrema, dificultad para permanecer sentado durante períodos prolongados y/o agotar a los demás con la propia actividad.
- Inquietud o golpeteo con las manos o los pies o retorciéndose en el asiento
- Ser incapaz de participar tranquilamente en actividades de ocio.
- hablar en exceso
- Responder preguntas antes de que se formulen por completo
- Tener dificultad para esperar su turno, como cuando espera en la fila
- Interrumpir o entrometerse en los demás
También hay que tomar en cuenta que otros trastornos mentales pueden ocurrir con el TDAH. Tales como los trastornos de ansiedad, del estado de ánimo y uso de sustancias.
Diagnostico del TDAH
Si te encuentras en la edad adulta y crees que puedes tener TDAH acudir con un profesional de la salud mental es lo más recomendable. Al acudir con un psicólogo, psicoterapeuta o psiquiatra, el profesional de la salud tomará en cuenta:
- La experimentaron de varios síntomas de TDAH antes de los 12 años.
- Las personas suelen experimentar al menos cinco síntomas persistentes de falta de atención y/o cinco síntomas persistentes de hiperactividad-impulsividad.
- Estos síntomas deben estar presentes en dos o más entornos (por ejemplo, el hogar, el trabajo o la escuela; con amigos o familiares) e interfieren o reducen la calidad del funcionamiento social, escolar o laboral.D
- Descartar estrés y otras condiciones de salud mental o condiciones y enfermedades físicas que pueden causar síntomas similares a los del TDAH.
Si estas buscando iniciar un proceso terapéutico, en Neopraxis podemos ayudarte y encontrar un especialista adecuado para ti.
¿Cómo se realiza el diagnostico de TDAH en adultos?
Para ello, es necesaria una evaluación exhaustiva que ayude a determinar la causa de los síntomas e identificar tratamientos efectivos. Durante esta evaluación, se examinarán factores que incluyen el estado de ánimo de la persona, su historial médico y si lucha con otros problemas, como el abuso de alcohol o sustancias.
Una evaluación exhaustiva también incluye observar el historial de comportamiento infantil y las experiencias escolares de la persona. Para obtener esta información, el profesional a cargo puede pedir tu autorización para hablar con tus parejas, familiares, amigos cercanos y otras personas que te conocen bien.
Uso de pruebas psicológicas
También puede hacer uso de escalas de calificación de comportamiento estandarizadas o listas de verificación de síntomas de TDAH para determinar si un cumples con los criterios para un diagnóstico de TDAH.
Estas pruebas psicológicas suelen analizar la memoria de trabajo, el funcionamiento ejecutivo (habilidades como la planificación y la toma de decisiones), las habilidades visuales y espaciales (relacionadas con el espacio) o el razonamiento (pensamiento).
También pueden ayudar a identificar fortalezas y desafíos psicológicos o cognitivos (relacionados con el pensamiento) y pueden usarse para identificar o descartar posibles discapacidades de aprendizaje.
Tratamiento del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad
No existe un tratamiento rápido ni único para el TDAH. Más bien se suele desarrollar un plan integral que incluye medicamentos, asesoramiento conductual, asesoramiento psicológico, educación y gestión de habilidades.
Toma en cuenta que cada persona con TDAH necesita de un tratamiento ligeramente diferente según su edad, temperamento, síntomas específicos y cómo responde al mismo.
Y aunque requiere de paciencia, puede puede ser necesario un poco de prueba y error hasta encontrar el plan de atención que mejor se adapte a tus necesidades; la buena noticia es que el tratamiento para el TDAH a demostrado ser funcional.
Tratamiento psicoterapéutico para TDAH en adultos
Hay diferentes opciones de terapia para alguien con TDAH. Algunas de estas opciones incluyen:
Terapia de comportamiento
Este tipo de terapia combina asesoramiento y psicoterapia con sugerencias para la modificación del comportamiento. El terapeuta puede ayudarte a organizar tu trabajo escolar o laboral, y a manejar las emociones que te parezcan más desafiantes.
La terapia conductual también puede ayudarte a reconocer tus patrones de comportamiento y tomar decisiones más conscientes antes de actuar sobre tus emociones. Los adultos que acuden a este tipo de terapia pueden aprender a estructurar su horario y establecer rutinas saludables en torno al trabajo y la productividad.
Meditación/Terapia Cognitiva Conductual
La terapia cognitiva conductual puede ser particularmente útil para las personas que tienen TDAH. Esta técnica te ayuda a reconocer y aceptar tus pensamientos. Te enseña cómo hacer una pausa consciente antes de actuar sobre tus pensamientos. Lo cual resulta altamente beneficioso ante los los comportamientos impulsivos del TDAH. Además puede ayudar con la concentración y el enfoque.
El terapeuta también podrá enseñarte técnicas de atención plena y meditación que ayudarán con tus síntomas.
Para conocer más sobre la terapia de comportamiento y cognitivo conductual puedes leer Conoce la psicoterapia cognitivo conductual.
Terapia familiar y matrimonial
La terapia familiar puede ayudar a las familias y los cónyuges a lidiar con los desafíos de relación que pueden resultar del TDAH. En estas sesiones de terapia se pueden trabajar las habilidades de comunicación y de resolución de problemas.
Conoce más sobre la terapia familiar en ¿Qué es la terapia psicológica familiar?.
Medicación para el tratamiento del TDAH en adultos
Los medicamentos para el TDAH deben ser recetados por un médico o un psiquiatra. El tipo de medicamento que funciona varía de persona a persona y puede cambiar a medida que envejece. Es posible que necesites algo de paciencia para encontrar el mejor medicamento para tu cuerpo y necesidades. Además, puedes tener diferentes experiencias en términos de efectos secundarios y es posible que debas cambiar la medicación o la dosis según la gravedad de los mismos.
Estimulantes
Estos son los medicamentos que con mayor probabilidad se recetarán a las personas que sean diagnosticadas con TDAH. Estos funcionan al equilibrar los niveles de neurotransmisores en tu cuerpo que son posiblemente los desencadenantes de tus síntomas.
Otros medicamentos comunes para el TDAH
Estos pueden incluir algunos tipos de antidepresivos. Los inconvenientes de estos es que no actúan tan rápido como los estimulantes. Sin embargo, muchas personas prefieren alternativas a los estimulantes, porque los estimulantes tienden a tener efectos secundarios desagradables, como problemas para dormir, disminución del apetito, dolores de cabeza e irritabilidad.
Modificaciones de estilo de vida
Finalmente hay cambios en la vida y la rutina para ayudar a controlar mejor el TDAH que pueden incluir:
- Hacer una lista de las tareas diarias y exhibirla en un lugar destacado (para los niños, esto puede implicar imágenes y etiquetado de muebles, ropa, etc.)
- Usar notas adhesivas como recordatorios o configurar recordatorios frecuentes para usted en sus dispositivos electrónicos.
- Establecer rutinas diarias fijas que ayuden a establecer el tono de su día y le recuerden lo que viene a continuación.
- Cree sistemas de organización dentro de su lugar de trabajo u hogar que estén orientados a sus sensibilidades y lo ayuden a concentrarse en la tarea
Recuerda que no estás solo y que la mejor opción siempre es consultar con un profesional de la salud y la salud mental para descartar o confirmar cualquier sospecha de TDAH.
Referencias:
- Wisner, W. y Catchings, C. (2022). Attention-Deficit Hyperactivity Disorder (ADHD): Symptoms, Causes & Treatment. Talk space. Mental health conditions.
- National Institutes of Health. (2021). Attention-Deficit/Hyperactivity Disorder in Adults: What You Need to Know.
