La felicidad es un estado emocional caracterizado por sentimientos de alegría, satisfacción y plenitud. Y si bien la felicidad tiene muchas definiciones diferentes, a menudo se describe como un conjunto de emociones positivas y un sentimiento de satisfacción con la vida.
Cuando la mayoría de las personas hablan de la felicidad, pueden estar hablando de cómo se sienten en el momento presente, o pueden estar refiriéndose a un sentido más general de cómo se sienten acerca de la vida en general. Por otra parte la felicidad no es un solo sentimiento y podemos sentirnos con bienestar sin estar precisamente felices.
Por ejemplo conoce 5 emociones positivas además de la felicidad.
Además sabemos que la felicidad puede predecir la salud y la longevidad. También se han creado escalas de felicidad que pueden usarse para medir el progreso social y el éxito de las políticas públicas. Pero la felicidad no es algo que simplemente te sucede. Todos tenemos el poder de hacer pequeños cambios en nuestro comportamiento, nuestro entorno y nuestras relaciones que pueden ayudarnos a encaminarnos hacia una vida más feliz. Descubre más a continuación.
Tabla de Contenidos
¿Cómo saber si soy feliz?: Signos de felicidad
Si bien las percepciones de la felicidad pueden ser diferentes de una persona a otra, existen algunos signos clave que los psicólogos buscan al medir y evaluar la felicidad. Algunos signos clave de felicidad incluyen:
- Sentir que estás viviendo la vida que querías
- Sentir que las condiciones de tu vida son buenas
- Pensar que has logrado (o lograrás) lo que quieres en la vida
- Sentirse satisfecho con su vida
- Tener más pensamientos positivos que pensamientos negativos o pesimistas
También tienes que saber que la felicidad no es un estado de euforia constante. En cambio, puede ser una sensación general de experimentar más emociones positivas que negativas. Además, cabe mencionar que las personas felices todavía sienten toda la gama de emociones humanas (ira, frustración, aburrimiento, soledad e incluso tristeza). Aunque incluso cuando se enfrentan a la incomodidad, tienen un sentimiento subyacente de optimismo. Es decir que puede pensar que las cosas mejorarán, que pueden lidiar con lo que está sucediendo y que podrán sentirse felices nuevamente. A esta característica también se le llama resiliencia.
Tipos de felicidad
Hay muchas maneras diferentes de pensar en la felicidad. Por ejemplo, el antiguo filósofo griego Aristóteles hizo una distinción entre dos tipos diferentes de felicidad: hedonia y eudaimonía.
- Hedonia: La felicidad hedónica se deriva del placer. Se asocia con mayor frecuencia con hacer lo que se siente bien, el cuidado personal, el cumplimiento de los deseos, el disfrute y la sensación de satisfacción.
- Eudaimonia: Este tipo de felicidad se deriva de buscar la virtud y el sentido. Componentes importantes del bienestar eudaimónico, incluido el sentimiento de que su vida tiene significado, valor y propósito. Se asocia más con el cumplimiento de responsabilidades, la inversión en objetivos a largo plazo, la preocupación por el bienestar de otras personas y la altura de los ideales personales.
Hedonia y eudemonia se conocen más comúnmente hoy en psicología como placer y significado, respectivamente. Más recientemente, los psicólogos han sugerido la adición del tercer componente relacionado con el compromiso. Son sentimientos de compromiso y participación en diferentes ámbitos de la vida. La investigación sugiere que las personas felices tienden a clasificarse bastante alto en la satisfacción con la vida eudaimónica y mejor que el promedio en su satisfacción con la vida hedónica.
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Todos estos pueden desempeñar un papel importante en la experiencia general de la felicidad, aunque el valor relativo de cada uno puede ser muy subjetivo. Algunas actividades pueden ser placenteras y significativas, mientras que otras pueden inclinarse más hacia un lado o hacia el otro. Y también existe la contraparte de la hedonia, la anhedonia, que se ha utilizado incluso como un criterio para el diagnostico de algunas condiciones como la depresión.
Emociones relacionadas a la felicidad: ejemplos.
Algunos tipos de felicidad pueden describirse como:
- Alegría: Un sentimiento a menudo relativamente breve que se siente en el momento presente.
- Entusiasmo: Un sentimiento feliz que implica esperar algo con anticipación positiva.
- Gratitud: una emoción positiva que implica estar agradecido y agradecido
- Orgullo: Un sentimiento de satisfacción por algo que has logrado
- Optimismo: Esta es una forma de ver la vida con una perspectiva positiva y optimista.
- Satisfacción: este tipo de felicidad implica una sensación de satisfacción.
¿Cómo ser más feliz?
A continuación te compartimos algunas acciones que puedes llevar a cabo para experimentar más momentos de felicidad y bienestar. Recuerda que ser feliz no es una obligación pero a todos nos hace bien tener momentos de genuina satisfacción.
Conquista el pensamiento negativo
En ocasiones tendemos a reflexionar más sobre las malas experiencias que sobre las positivas. Es una adaptación evolutiva: aprender demasiado de las situaciones peligrosas o dolorosas que encontramos a lo largo de la vida (acoso, trauma, traición) nos ayuda a evitarlas en el futuro y a reaccionar rápidamente en una crisis. Sin embargo esto significa que tenemos que trabajar un poco más para que estos pensamientos intrusivos negativos no resulten contraproducentes. Algunas formas de hacerlo son:
- No intentes detener los pensamientos negativos. En cambio, vuélvete el dueño de tus preocupaciones. Cuando estés en un ciclo negativo, reconócelo. “Me preocupa el dinero”. “Estoy obsesionado con los problemas en el trabajo”.
- Trátate como un amigo. Cuando te sientas negativo contigo mismo, pregúntate qué consejo le darías a un amigo que se siente mal consigo mismo. Y luego trata de aplicarte ese consejo.
- Desafía tus pensamientos negativos. El cuestionamiento socrático es el proceso de desafiar y cambiar los pensamientos irracionales. El objetivo es llevarte de una mentalidad negativa (“Soy un fracaso”) a una más positiva (“He tenido mucho éxito en mi carrera. Este es solo un revés que no se refleja en Puedo aprender de ello y ser mejor.”)
- Otra forma de hacerlo es primero, escribir tu pensamiento negativo, como “Tengo problemas en el trabajo y estoy cuestionando mis habilidades”. Para luego preguntarte:
- “¿Cuál es la evidencia de este pensamiento?”
- “¿Me estoy basando en hechos? ¿O sentimientos?
- “¿Podría estar malinterpretando la situación?”
- “¿Cómo podrían otras personas ver la situación de manera diferente?
- “¿Cómo podría ver yo esta situación si le pasara a otra persona?”
- Respiración controlada
Los estudios han encontrado, por ejemplo, que las prácticas de respiración pueden ayudar a reducir los síntomas asociados con la ansiedad, el insomnio, el trastorno de estrés postraumático, la depresión y el trastorno por déficit de atención.
Reescribe tu historia
Escribir sobre uno mismo y sus experiencias personales, y luego reescribir su historia, puede conducir a cambios de comportamiento y contribuir al sentimiento de felicidad. Algunas investigaciones sugieren que escribir en un diario personal durante 15 minutos al día puede aumentar la felicidad y el bienestar general. En parte porque nos permite expresar nuestras emociones, ser conscientes de nuestras circunstancias y resolver conflictos internos. Y por otra parte por que puede ayudarnos a dar el siguiente paso y concentrarnos en un desafío particular al que nos enfrentamos, y escribir y reescribir esa historia. Puedes realizar el siguiente ejercicio de escritura:
- Escribe una breve historia sobre tu lucha. Estoy teniendo problemas de dinero. Estoy teniendo dificultades para hacer amigos en una nueva ciudad. Nunca voy a encontrar el amor. Estoy peleando con mi pareja.
- Ahora escribe una nueva historia desde el punto de vista de un observador neutral, o con el tipo de aliento que le darías a un amigo. Por ejemplo: “El dinero es un desafío, pero puede tomar medidas para ponerse en forma financiera” o “Todos luchan en su primer año en una nueva ciudad. Dale tiempo. Únete a algunos grupos.”
Ponte en movimiento
Cuando las personas se levantan y se mueven, aunque sea un poco, tienden a ser más felices que cuando están quietas. Un estudio que rastreó el movimiento y el estado de ánimo de los usuarios de teléfonos celulares encontró que las personas reportaron mayor felicidad si se habían estado moviendo en los últimos 15 minutos que cuando estaban sentadas o acostadas. La mayor parte del tiempo no era una actividad rigurosa, sino solo una caminata suave que los dejaba en un buen estado de ánimo.
La regla de 1 minuto
La Sra. Rubin, es autora de “Felicidad en el hogar” y muchas otras guías y artículos útiles sobre la felicidad y los buenos hábitos. Ella propone una regla de un minuto que consiste en hacer cualquier tarea que se pueda terminar en un minuto. Este simple y sabio consejo por ejemplo puede ayudarte a decidir por que actividades comenzar cuando hay mucho que hacer. Observa esta lista de cosas que hacer por ejemplo:
- Cuelga un abrigo.
- Lee una carta y tírala.
- Llenar un formulario.
- Responde un correo electrónico.
- Anota una cita.
- Recoger mensajes telefónicos.
- Archivar un papel.
- Pon un plato en el lavavajillas.
- Guarda las revistas.
Ir completando actividades por mas simples que parezcan pueden darte breves impulsos de felicidad después de lograr tanto en poco tiempo y, como beneficio adicional, terminará con una habitación más limpia, lo que también lo hará feliz.
Referencias
- Cherry, C. (2022). What Is Happiness?. Verywell mind.
- Parker-Pope, T. (2022). How to Be Happy. NY Times.